HISTORIA DEL CAFÉ AMERICANO

Existe una leyenda sobre el café americano que señala su origen en la Segunda  Guerra Mundial, cuando las tropas americanas se asentaron en Italia.

Los soldados americanos no soportaban el intenso sabor del espresso italiano, puesto que ellos estaban acostumbrados al café de filtro, así que los baristas italianos añadieron agua caliente al café espresso para adaptarlo al gusto de los soldados, y lo bautizaron cómo Café Americano. 

Pero... Cuál de ellos es el verdadero café americano? Él espresso al que se le añade agua, o el café de filtro?

Para muchos el auténtico es el de filtro, porque esta es la forma en la que se prepara habitualmente en Estados Unidos. 

No hay ni una sola película americana en la que no salga una cafetera de filtro.

Para otros, el café americano es un café espresso al que se añade agua caliente.

De cualquier manera la taza que se obtiene en ambos casos es un café más suave, que os invito a que probéis.

El café de filtro ha estado muy maltratado los últimos años injustamente.

A día de hoy con un café de calidad podemos obtener una taza deliciosa, sacar vuestra Melitta del armario y probar!!!

Y si os preparan un café americano en una cafetería, que lo hagan bien, añadiendo agua caliente al espresso, o al revés, primero el agua y después el café, conseguiremos que la crema se mantenga mejor. 

Lo que no hay que hacer nunca es una extracción muy larga, es decir, pulsar el continuo y llenar el vaso, de esta forma obtenemos todo lo contrario a lo que buscamos. Un café sobrextraido, quemado y con  más cafeína.

 Una taza de café bien preparada siempre es un placer!!!

           Carmen Asensio.